El presidente boliviano, Luis Arce, destacó que Bolivia es la segunda economía de mayor crecimiento y con la inflación más baja de la región, desafiando las críticas y el contexto económico adverso.
En un discurso en Trinidad, Beni, resaltó los logros a pesar de boicots económicos y la crisis internacional. Arce atribuyó el bajo índice de inflación al hecho de no tener vínculos con el dólar, a diferencia de Ecuador, la única economía con una inflación más baja.
A pesar de las críticas sobre su gestión económica, incluida la falta de medidas estructurales, Arce defendió el crecimiento y prometió continuar trabajando por el progreso del país.
Analistas han advertido sobre la caída de reservas internacionales, el agotamiento de recursos como el gas, el aumento de la deuda y la escasez de dólares, pero el gobierno niega una crisis económica.