La Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), junto con la Policía Boliviana, identificó en Chiñata, Cochabamba, cinco vehículos realizando cargas repetitivas de combustible, algunos con tanques y placas adicionales, visitando estaciones de servicio hasta siete veces al día.
Los vehículos fueron retenidos y remitidos a la FELCC para investigaciones. Cuatro personas fueron detenidas como resultado de este operativo destinado a prevenir el contrabando de combustible.
Según el artículo 226 Bis del Código Penal, el almacenamiento, transporte y comercialización de combustibles conlleva una pena de privación de libertad de 3 a 6 años. Este control busca garantizar el cumplimiento de la ley y proteger los recursos nacionales.