El Departamento de Justicia de EEUU informó este miércoles que el exministro de Gobierno del régimen de Áñez, Arturo Murillo, puede recibir una sanción de 20 años de cárcel por estar involucrado en un hecho de sobornos y lavado de dinero por el caso denominado gases lacrimógenos.
Mediante un comunicado oficial, indicó que Arturo Murillo, Rodrigo Méndez, Luis Berkman, Bryan Berkman y Philip Lichtenfeld participaron en un esquema de soborno entre noviembre de 2019 y abril de 2020.
“Las cinco personas están acusadas de un cargo de conspiración para cometer lavado de dinero. Si son declarados culpables, se enfrentan a una pena máxima de 20 años de prisión. Un juez de un tribunal de distrito federal determinará cualquier sentencia después de considerar las pautas de sentencia de EEUU”, se lee en parte del comunicado difundido esta jornada.
El 21 de mayo fue detenido en Florida, Rodrigo Méndez, jefe de Gabinete y uno de los hombres de confianza de Arturo Murillo, acusado de haber recibido dinero en sus cuentas de EEUU.
El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, informó esta tarde que Murillo ya fue aprehendido e imputado en EEUU.
El exministro de Jeanine Áñez es investigado por recibir sobornos para asegurar un contrato con el Gobierno boliviano y luego utilizar el sistema financiero estadounidense para lavar esos sobornos.
Según la información proporcionada por el Departamento de Justicia de EEUU, los estadounidenses Luis Berkman, Bryan Berkman y Lichtenfeld pagaron $us 602.000 en sobornos a funcionarios del Gobierno boliviano en beneficio de Murillo, Méndez y otro boliviano funcionario público de ese entonces.
Los indicios muestran que el objetivo de ese pago irregular fue que la empresa de Bryan Berkman, con sede en Florida, obtuviera y mantuviera negocios del Ministerio de Defensa de Bolivia, específicamente, un contrato de aproximadamente $us 5,6 millones para proporcionar a esta cartera de Estado gas lacrimógeno y otros equipos no letales.
AQB / Agencia Boliviana de Información