El Tribunal de Sentencia Primero de Cochabamba determinó que Jhasmani Torrico sea sentenciado a ocho años de cárcel por el caso consorcio y que deberá cumplirlos en el penal San Sebastián Varones. Junto al polémico abogado, otros cuatro implicados también fueron condenados y otros cuatro resultaron absueltos.
María Anawella Torrez fue condenada a cinco años de prisión; Clever Torrico, a dos años y seis meses; Carlos Pacheco, a tres años; y Jorge Torrico, tres años, según detalló la autoridad jurisdiccional.
Una vez concluida, la audiencia Torrico señaló que “se ha probado que jamás ha habido un consorcio” y que por eso se tuvo que cambiar la tipificación del delito penal.
“Con relación al cambio del delito se debe advertir lo siguiente: respeto mucho el criterio del tribunal, me parece el adecuado (…), pero en un criterio muy personal no existe cohecho si no acreditas la plata. ¿Qué clase de cohecho es si no hay dinero de por medio?”, expresó el también conocido como “abogado del diablo”.
El sentenciado expresó, con el tono burlesco que lo caracteriza, que la decisión del juez no le genera “ningún tipo de agravio” porque tiene conocimiento de la norma, y que lo más importante fue la absolución de su esposa.
Adelantó que iniciará un proceso correspondiente contra el Ministerio Público porque la acusación que hizo contra ella fue “temeraria”. “Así que me van a pagar caro”, advirtió.
Por otro lado, la representante distrital del Consejo de la Magistratura, Sidia Alba, reveló que la lectura íntegra de la sentencia se realizará el próximo lunes.
El fiscal Mauricio Olivares, uno de los nueve implicados, fue absuelto porque no se encontraron elementos de convicción que demuestren su participación en el caso.
“Les dije desde un principio que yo era inocente y a seguir con la vida y con el trabajo (…) Dios bendito, se ha hecho justicia”, afirmó tras la culminación del juicio.
Abogado torturador o del diablo
El abogado Jhasmani Torrico fue conocido en enero de 2019 a través de unos videos en los que se lo observa golpeando y torturando a unos demandantes para el pago de algunas deudas.
Una de las víctimas es Juan Antonio Cuéllar, un mecánico que denunció que esos métodos del abogado datan desde 2017. En febrero del pasado año, Torrico fue condenado a seis años y seis meses de cárcel por ese caso.