Cuando se termina el amor, muchas veces resulta difícil alejarse de la otra persona. Soltar, dejar ir. Y en el caso de un matrimonio, con papeles de por medio, la situación se presenta aún más compleja.
El amor y los papeles no siempre corren por los mismo carriles y, se sabe, las dos partes deben estar de acuerdo para firmar este acuerdo de separación.
Warren y Gina Zant se casaron en 1999 y tras dos décadas de convivencia se separaron.
Entonces, presentaron un acuerdo de separación en el que se establecía que la mujer recibiría las prestaciones de supervivencia del Plan de Pensiones de los Ingenieros de Operaciones del que fuera su marido.
Sin embargo, con el paso de los años, el hombre presentó un extraño caso ante el juez en el que solicitaba la anulación de su antiguo matrimonio.
Para ello se basaba justamente en el testimonio de su exmujer, quien afirmaba haber sido plenamente consciente de que su matrimonio no había sido legalmente vinculante, difunde 20Minutos.
El juez tomó cartas en el asunto, aprobó la petición, pero había algo en el caso que no encajaba con la realidad. Y no era un detalle menor: Warren Zant había utilizado a una mujer que no era Gina para hacerse pasar por ella y firmar este acuerdo.
La verdadera Gina se enteró de la situación y se puso en contacto con los especialistas que llevaban el caso para declarar que nunca había estado involucrada en en esta petición.
Fue entonces que el juez indagó entre los documentos presentados y descubrió datos dudosos que respaldaban la solicitud original de anulación de Warren Zant.
Algunos ejemplos era comisarios y notarios falsos, y por supuesto lo más impactante, la impostora que cumplía con la función de ser la exmujer.
Tras el incidente que se hizo viral, no se sabe si Warren Zant y la persona que se hizo pasar por su exmujer sufrirán alguna consecuencia legal. Por lo pronto, el abogado de Gina Zant asegura que una multa sería lo mínimo.