Este martes, los pobladores de Yapacaní, en Santa Cruz, cumplen el quinto día de bloqueo en la zona de Cascabel, en la carretera nueva que conecta con Cochabamba.
Exigen el asfaltado de 30 km de la carretera que une Yapacaní con el Norte Integrado cruceño. La medida de presión incluye la amenaza de cerrar las válvulas de la planta de producción Sirari, operada por YPFB Andina S.A.
Movilización a La Paz
Una comisión viajará a La Paz para llevar la protesta a la Asamblea Legislativa, demandando que los parlamentarios aprueben el crédito externo necesario para la construcción del tramo Norte Integrado – Yapacaní. Este proyecto, de 30 km de asfalto, es crucial para la conexión y desarrollo de la región.
Declaraciones de Legisladores
El diputado Jerges Mercado, del ala arcista, subrayó la necesidad de voluntad política de los legisladores para aprobar el proyecto. Criticó las medidas de presión como el cierre de válvulas y el bloqueo de carreteras, destacando que la aprobación de leyes depende del voto de los diputados. Mercado aseguró que el proyecto está listo para ser aprobado en la Cámara de Diputados, estando en la fase de informe de comisión.
Financiamiento del Proyecto
En febrero, el gabinete de ministros del presidente Luis Arce autorizó la suscripción de un contrato de préstamo con la CAF-Banco de Desarrollo de América Latina, por $us 35 millones, para financiar el ‘Proyecto de Construcción Camino Norte Integrado – Yapacaní’. Este financiamiento es esencial para avanzar con las obras y satisfacer las demandas de los pobladores.