El sábado pasado, Japón experimentó una notable demanda de retretes portátiles, alimentos enlatados y agua embotellada, según reportó Rakuten, gigante del comercio electrónico.
Esta oleada de compras se desató después de que el gobierno anunciara el 8 de agosto la posibilidad de un ‘megaterremoto’. La población, alarmada, comenzó a hacer reservas, y algunos supermercados en Tokio ya reportan escasez de productos.
Llamado a la Prudencia
Las autoridades japonesas han instado a la población a no realizar “reservas excesivas” de bienes de consumo, a pesar de la alerta. En un mensaje publicado en la red social X, el Ministerio de Agricultura y Pesca recomendó preparar “una reserva de tres días [de preferencia una semana] por persona”, pero pidió evitar el acaparamiento de productos esenciales.
Incertidumbre Tras el Sismo
La Agencia Meteorológica de Japón (JMA) emitió un “aviso de megaterremoto” tras un sismo de magnitud 7,1 que sacudió el sur del país el jueves, causando 14 heridos. “La probabilidad de que se produzca otro terremoto potente es mayor que en tiempos normales, pero esto no significa que se vaya a producir con toda seguridad”, aclaró la agencia. Este aviso es el primero emitido desde la implementación del nuevo sistema de alertas tras el terremoto de 2011 y el accidente de Fukushima. Las autoridades también han ordenado a las centrales nucleares revisar sus planes de emergencia.