El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, acusó a WhatsApp, propiedad de la estadounidense Meta, de entregar información personal de los usuarios a los líderes opositores Edmundo González Urrutia y María Corina Machado.
Según Maduro, WhatsApp habría compartido «toda la base de datos» del país con los opositores, incluyendo detalles sobre familias, amigos, y preferencias de los ciudadanos.
Acusaciones Fuertes y Medidas Radicales
Maduro calificó a Machado como una «diabla, terrorista y asesina» y afirmó que González Urrutia y su equipo obtuvieron datos de millones de venezolanos. Denunció que WhatsApp está en manos del «imperialismo tecnológico», y pidió a la población eliminar la aplicación de sus teléfonos. Esta campaña es parte de una ofensiva más amplia contra redes sociales que Maduro inició recientemente, tras las protestas que siguieron a las elecciones presidenciales del 28 de julio, que el Gobierno declara haber ganado, pero que la oposición rechaza por considerarlas fraudulentas.
Consecuencias de la Represión
Desde el 29 de julio, más de 2.400 personas han sido detenidas en Venezuela, muchas durante protestas que el Gobierno tilda de «criminales». Al menos 25 personas han muerto en los enfrentamientos, un escenario que refleja la creciente tensión política en el país.