El líder de la Resistencia Juvenil Cochala (RJC), Jassir Molina, presentó un memorial al fiscal General del Estado, Juan Lanchipa, para pedirle someterse a un procedimiento abreviado, en el cual asumirá la su responsabilidad por los delitos que se lo acusa para ser condenado por la justicia.
Esta determinación la hace conocer Jassir, luego de cambiar de patrocinio legal. Quien asumió su defensa fue Jhasmani Torrico, que tiene arresto domiciliario con derecho al trabajo y es conocido como “el abogado torturador”, por ser acusado de torturar a las personas para cobrar deudas.
“Estoy muy molesto y decepcionado del actuar de muchas personas que solo se han beneficiado y que no solo nos utilizan, sino nos abandonan. Abandonan a un movimiento ciudadano genuino que luchó por lo que se creía correcto, defendiendo su ciudad, su integridad y sus familias. Jamás fue para el beneficio de alguien en particular”, dice parte de la carta escrita por el líder de la RJC, quien guarda detención preventiva en la cárcel de San Pedro de Oruro,
Jassir indica que la RJC “no es un grupo delincuencial” y dice que este movimiento fue usado por personas particulares para sus beneficios personales, para quienes pidió que sean sancionados. “Libertad para todos aquellos que solo fuimos herramientas para los verdaderos traidores”, escribió.
Por su parte, el abogado Torrico explicó que en la carta enviada al fiscal Lanchipa y a los administradores de la justicia se pide conocer qué procesos se le sigue a Jassir Molina, cuáles son los fiscales asignados y a qué autoridades se debe hacer llegar el pedido de su procedimiento abreviado.
El Deber