El Gobierno boliviano ha identificado un clan de secuestradores liderado por Ariel Villarroel Calle y Rolando Rengifo Mérida, quienes siguen activos en la región del trópico, generando temor entre los habitantes y desencadenando una serie de hechos delictivos.
Crimen y Violencia
En los últimos tres meses, se han registrado diversos actos delictivos atribuidos a esta organización criminal, incluyendo un acribillamiento, un doble asesinato y un secuestro. Estos eventos han sembrado el miedo en la población local.
Operación Criminal
El modus operandi de este clan implica un estudio previo para determinar la viabilidad de obtener un rescate. Además del secuestro, la banda está vinculada con actividades como el narcotráfico y los asesinatos.
Desafíos en la Lucha contra el Crimen
El viceministro de Régimen Interior y Policía, Jhonny Aguilera, ha señalado la responsabilidad del sistema judicial en la continuidad de estas actividades delictivas, especialmente al liberar a los líderes criminales.
Necesidad de Confianza Comunitaria
Expertos como la criminóloga Gabriela Reyes enfatizan la importancia de generar confianza con la población local para una colaboración efectiva en la lucha contra el crimen. El modelo de diálogo y cooperación ha demostrado ser más exitoso que los enfoques violentos.
Además del clan liderado por Villarroel y Rengifo, se han identificado otros grupos delictivos en la región del trópico. Un ejemplo es la banda encabezada por Nabor López, que también se dedicaba al secuestro y fue desarticulada por las autoridades.
La lucha contra el crimen organizado en el trópico de Cochabamba enfrenta desafíos significativos, desde la liberación de criminales por parte del sistema judicial hasta la necesidad de ganarse la confianza de la comunidad para una colaboración efectiva. Es crucial abordar estos problemas para garantizar la seguridad y el bienestar de la población local.