Las cajas de ahorro cayeron en 9,15%, de Bs 69.982 millones a Bs 63.574 millones, según el reporte de ASFI.
Entre enero y marzo de esta gestión, el dinero depositado en las entidades de intermediación financiera se redujo en Bs 8.796 millones, en un tiempo en que hay una mayor demanda de la población por dólares estadounidenses.
El último informe de la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI) da cuenta de que a diciembre de 2022 el sistema financiero cerró con Bs 224.040 millones en depósitos y que ese monto se redujo a Bs 215.244 millones a marzo de este año, lo que representa una disminución del 4%.
Los depósitos a plazo fijo disminuyeron en 0,34%, las cajas de ahorro en 9,15% y los depósitos a la vista en 4,15%.
Un reporte de la Asociación de Bancos Privados de Bolivia (Asoban) señala que las captaciones del público a marzo de 2023 alcanzaron los $us 29.156 millones, registrando un crecimiento del 0,9% en los últimos 12 meses, por un monto equivalente a $us 269 millones. Sin embargo, en relación a diciembre de 2022, los depósitos cayeron en $us 1.307 millones, de los cuales el 92% correspondió a moneda nacional.
La mayor salida se registró en depósitos de cajas de ahorro, cuyos saldos retrocedieron en $us 921 millones, indica el documento.
“La situación de los depósitos en Bolivia se ha visto afectada en los primeros tres meses de 2023, registrando una inusitada salida de depósitos denominados en moneda extranjera y nacional, lo que ha generado una contracción en la brecha de depósitos a cartera, situándose en $us 562 millones, el menor nivel observado en al menos la última década”, enfatiza el análisis de Asoban.
“Se espera que en perspectiva, en la medida en que las expectativas de la población se estabilicen, al menos una parte de los depósitos retorne al sistema financiero, ampliando nuevamente la brecha de saldos entre depósitos y cartera de créditos, elemento esencial para el crecimiento del sector”, sostuvo la asociación de bancos.
Fuente: El Deber