El sábado, el interventor había almorzado con su hija y luego se fue a trabajar «en un importante informe» que tenía que presentar este lunes. Estaba bajo presión
El cuerpo del interventor del Banco Fassil Carlos Alberto Colodro presentaba hematomas y esto deja abierta la posibilidad de que su muerte haya sido producto de un crimen, señaló el abogado Jorge Valda, quien representa a la familia del infortunado funcionario.
“Había múltiples hematomas; no solamente en el pecho, la parte donde sufrió el impacto de la caída. No contaba con un globo ocular, tampoco contaba con un testículo. Este extremo tiene que ser investigado”, remarcó el jurista.
“En un suceso de muerte por impacto colapsan los órganos, pero cuando existe una situación en la que no se explican lesiones múltiples en el cráneo, en el rostro y en la espalda, esto debe ser esclarecido”, insistió.
Colodro perdió la vida el sábado por la noche tras caer del pido 14 del edificio donde se encontraba su oficina. Valda indicó que acudió a esas instalaciones a las 17:30 para terminar “un informe importante que debía entregar este lunes”.
Además, el interventor había anunciado el pago de haberes a los exfuncionarios del Banco Fassil a partir del lunes. También adelantó la puesta en marcha del proceso de liquidación y la venta de las decenas de inmuebles que tenía la entidad financiera, especialmente en Santa Cruz de la Sierra.
El sábado, el día de su deceso, Colodro había almorzado con su hija y, por la tarde, estuvo en el Manzana 40, un centro empresarial que está en Equipetrol y desde donde se opera el proceso de intervención. De allí, recién se fue al edificio Ambassador, donde tiene su oficina.
Valda indicó que no estaba solo y que la Fiscalía ya citó a varios testigos. Ya tomó declaraciones a la familia y realizó la autopsia de ley. El jurista manifiesta su alarma ante la hora de la muerte dispuesta (20:30) y el retardo en la intervención policial, pasadas las 22:00.
“No queremos anticiparnos a decir que ha sido un asesinato con tortura, pero existe la posibilidad de que esto hubiese ocurrido así. No nos estamos adelantando a nada”, dijo.
Eso sí, sobre la base de testimonios de la familia, el jurista señalo que Colodro estaba bajo una elevada presión laboral y que había recibido amenazas. Pidió que la documentación sensible sea devuelta a los familiares e insistió en la necesidad de una investigación clara.
“Las primeras 48 horas tras el suceso son vitales”, remarcó Valda.
Fuente: EL DEBER