Un joven de 19 años fue intervenido y sufrió la amputación de ambas piernas luego de que se sintiera mal tras comer sobras de comida del día anterior, según la revista científica The New England Journal of Medicine.
El joven identificado como JC, de Reino Unido, comió un plato de fideos con pollo que su amigo había pedido la noche anterior, pero de inmediato comenzó a mostrar signos de que algo andaba mal y se enfermó.
Tenía una temperatura muy alta con una frecuencia cardíaca de 166 latidos por minuto cuando lo llevaron al hospital y lo sedaron. Afirman que, según los registros médicos, no tenía alergias y contaba con todas las vacunas desde su infancia.
Tenía una temperatura muy alta con una frecuencia cardíaca de 166 latidos por minuto cuando lo llevaron al hospital y lo sedaron. Afirman que, según los registros médicos, no tenía alergias y contaba con todas las vacunas desde su infancia.
Falla multiorgánica y erupción cutánea
La condición del joven empeoró rápidamente y tuvo que ser trasladado en helicóptero a otro hospital para recibir un tratamiento más adecuado.
El informe del Journal decía: «El paciente había estado bien hasta 20 horas antes de esta admisión cuando desarrolló dolor abdominal difuso y náuseas después de comer fideo, pollo y sobras de una comida en un restaurante».
Según el NEJM, el estudiante trabajaba a tiempo parcial en un restaurante y no había viajado recientemente ni había estado expuesto a animales o personas enfermas. Sí se supo que su padre tenía una enfermedad de las arterias coronarias y que su hermano había sufrido meningitis viral cuando tenía seis semanas.
«El dolor abdominal y los vómitos fueron seguidos por el desarrollo de escalofríos, debilidad generalizada, mialgias difusas que empeoran progresivamente, dolor en el pecho, dificultad para respirar, dolor de cabeza, rigidez en el cuello y visión borrosa», enumeró The Journal.
«Se confirmó que padecía una infección bacteriana agresiva que hizo que sus riñones fallaran y su sangre comenzara a coagularse». Fue entonces que los resultados de las bacterias en su sangre dieron positivo para Neisseria meningitidis, que es una forma de sepsis que puede matar a quienes la padecen.
Al parecer, especulan que se infectó con la bacteria a través de su saliva y no recibió una inyección de refuerzo de la vacuna meningocócica que debía recibir a la edad de 16 años.
El tejido de sus dedos desarrolló gangrena, al igual que sus piernas hasta los pies, lo que provocó la amputación de partes de todos sus dedos y amputaciones debajo de la rodilla.
El médico Dr. Bernard calificó el incidente como un «accidente extraño» y, pese a todo, destacó que el estudiante logró sobrevivir a la terrible experiencia.