Evo Morales, expresidente de Bolivia, reaccionó a la denuncia en su contra por los delitos de trata, tráfico y estupro, asegurando que es víctima de una “persecución política” por parte de los gobiernos neoliberales.
En sus declaraciones en redes sociales, enfatizó que no se siente preocupado por las acusaciones, ya que siempre ha sido perseguido y cuenta con “el apoyo del pueblo”.
Declaraciones contundentes
“¡No me extraña ni me preocupa! Todos los Gobiernos neoliberales, incluido el actual, me amenazaron, me persiguieron, me encarcelaron, intentaron matarme. No tengo miedo! No me callarán!” fueron las palabras de Morales, quien reafirma su intención de no permanecer en silencio a pesar de las denuncias.
Investigación en curso
La Fiscalía General de Tarija ha activado una investigación que incluyó una orden de aprehensión, aunque esta fue anulada por una Sala Constitucional en Santa Cruz. La situación se complicó cuando Sandra Gutiérrez, exfiscal departamental, denunció haber sido destituida por intentar investigar a Morales, lo que ha generado un escándalo en el ámbito judicial.
Posición del fiscal general
Juan Lanchipa, fiscal general del Estado, negó haber ordenado detener las investigaciones y afirmó que Morales continúa bajo escrutinio. La denuncia se agrava al considerar que, si se comprueba la relación con una adolescente de 15 años, podría configurarse el delito de estupro, según los registros de la Fiscalía.