El vocalista y líder de la banda Queen estaría festejando este martes un nuevo cumpleaños.
Freddie Mercury hubiera cumplido hoy 77 años. No hay mucho que no se haya dicho ya sobre la figura del emblemático vocalista de Queen, que cambió para siempre la historia de la música.
El artista nacido en Stone Town, Ciudad de Zanzíbar, actual Tanzania, fue un cantante y compositor británico de origen parsi que alcanzó fama mundial por ser el vocalista principal y pianista de la banda de Rock Queen. Fue mundialmente reconocido por su poderosa voz y extravagantes puestas en escena.
El nacido en Stone Town, Ciudad de Zanzíbar, actual Tanzania, como compositor, escribió muchos de los éxitos de Queen, tales como Killer Queen, Bohemian Rhapsody, Somebody to Love, We Are the Champions, Don’t Stop Me Now, Crazy Little Thing Called Love, It’s a Hard Life o Innuendo. Además de la actividad con la banda, en los años ochenta lanzó su carrera como solista que lo llevó a publicar dos álbumes: Mr. Bad Guy (1985) y Barcelona (1988), este último en colaboración con la soprano española Montserrat Caballé. El sencillo homónimo, una colaboración entre ambos, fue la canción oficial de los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992.
Subastan sus objetos personales
En medio de la conmemoración de su nuevo cumpleaños, han sido subastado más de 1.500 objetos personales. Desde un pequeño peine para bigote y el tocadiscos en el que ponía música para desayunar hasta manuscritos del puño y letra donde plasmó algunas de las canciones que se convirtieron en himnos de toda una generación: todo eso forma parte de un lote de más de 1.500 objetos de Freddie Mercury que saldrán a subasta a partir del miércoles en Londres, en coincidencia con el nacimiento del artista que este martes hubiera cumplido 77 años.
Los artículos fueron retirados de la mansión en la que el cantante de Queen vivió desde 1980 hasta 1991 -año en el que falleció debido a las complicaciones que le produjo el sida- y salen ahora a subasta por decisión de Mary Austin, quien tuvo una relación amorosa de seis años con el cantante y luego fue su amiga íntima.
La mujer heredó su casa de 28 habitaciones y 25 millones de dólares al morir el artista y decidió donar una parte de las ganancias de la venta a dos organizaciones benéficas: el Mercury Phoenix Trust, que fue fundado en honor al vocalista por Brian May y Roger Taylor de Queen, junto a su manager Jim Beach, y la Elton John Aids Foundation, que lucha contra el sida.
El souvenir más caro de la subasta es el piano negro de media cola Yamaha G2 Baby Grand, que el cantante cuidaba con esmero: no permitía que fumaran cerca de él, o que le pusieran un vaso encima. Mercury sentía una conexión creativa única con este instrumento, que está valuado en casi cuatro millones de dólares.