Una organización de delincuentes de alcance internacional, montó una fábrica de reenvasado de “cervezas” en una casa en la ciudad de El Alto donde adulteraban las “chelas” y hasta se hacían traer tapacoronas desde China donde tenían contactos con gente que también se dedicaba a la falsificación.
Al reenvasado del producto de cerveza de marcas desconocidas le ponían el logo de una cerveza de marca. Hablamos de más de 40 mil unidades de tapacoronas que fueron incautadas junto con las botellas y cerveza de baja calidad”, afirmó el subdirector de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), Juan José Donaire.
A los falsificadores les calcaron los pasos durante tres meses hasta que los agentes del orden descubrieron un “esquema” en el cual la organización delincuencial se dedicaba a la importación de tapacoronas, el reenvasado de cervezas y después vendían el producto a los pasantes de las fiestas.
Los antisociales vendían el producto en eventos sociales y también acomodaban las cervezas truchas en tiendas barriales donde los que caían como moscan a la miel eran los borrachitos que no se daban cuenta de lo que tomaban.
“La investigación comenzó en octubre del año pasado, cuando la Policía recibió el dato de que se había importado desde China 40 mil tapacoronas con el logotipo de la Cervecería Boliviana Nacional, en particular los productos Paceña y Huari”, informó a su turno, el jefe de la fuerza anticrimen, coronel Rolando Rojas.
ESQUEMA
El sabor del producto era similar a la cerveza nacional, aunque algunos ebrios notaban la diferencia, pero seguían tomando bajo la lógica del “dositos más y después nos vamos” porque los antisociales falsificaron el producto casi a la perfección.
A pesar que estafaron a muchas tiendas y a los pasantes de las fiestas sociales, los delincuentes pasaron por alto un dato importante y es que al momento de pedir la importación de las 40 tapacoronas dejaron la punta del ovillo y gracias a ese dato comenzaron a seguirles los pasos.
En octubre del 2022, se realizaron varios allanamientos en las poblaciones de Patacamaya, Ayo Ayo y El Alto para dar con la empresa importadoras de las tapitas.
“En los allanamientos a distribuidoras de cerveza, se pudo evidenciar la presencia de elementos de convicción”, detalló el subdirector de la FELCC, Juan José Donaire al agregar que ese dato se convirtió en la pista del ovillo.
El martes 7 de febrero, se intervino un galpón en la zona 27 de septiembre de El Alto, donde encontraron una máquina prensadora de las tapas, que se encargaba de sellar las boquillas de las botellas, rellenadas con la cerveza trucha. También encontraron botellas y etiquetas con los logotipos de la marca de cervezas internacionales y otras de baja calidad.
En el operativo se arrestó a tres personas y se aprehendió a una que enfrentará cargos por atentado a la salud y falsificación de cervezas y se informa que algunos de ellos ya cantaron todo.
Fuente: http://www.elalteno.com.bo