En un mundo cada vez más agitado, dormir bien se ha vuelto un desafío para muchos, un estudio publicado en el Journal of Clinical Sleep Medicine reveló que casi el 40% de las personas encuestadas en 13 países ha tenido dificultades para conciliar el sueño en los últimos dos años.
Las malas noticias pueden mantener la mente activa, dificultando un sueño reparador.
Revise su almohada
Si su almohada es de 2020, ¡es hora de cambiarla! La Fundación Nacional del Sueño de los Estados Unidos recomienda renovar las almohadas cada uno o dos años. “Cuando el cerebro envía señales de dolor, no puede ocuparse de transmitir señales del sueño”, explica el doctor Michael J. Breus. Una almohada adecuada puede mejorar significativamente su descanso.
Tome sol diariamente
La luz solar matutina es clave para regular el sueño. “Cierre la canilla de melatonina en el cerebro”, sugiere Breus. Exponerse al sol directo por 15 a 30 minutos cada mañana ayuda a regular el reloj interno y mejora la calidad del sueño nocturno.
Evite lo salado antes de dormir
Reducir el consumo de sal antes de acostarse puede disminuir las interrupciones nocturnas. Un estudio japonés encontró que reducir la sal ayuda a evitar visitas frecuentes al baño durante la noche.
Resuelva problemas temprano
“Justo antes de la cena es buen momento” para abordar temas difíciles, aconseja Ashley Mason. Esto evita discusiones prolongadas que pueden alterar el sueño.